“Todo se puede leer”

La frase es de Patricia Elizalde, docente de la escuela Felipe Barthou de Lanco. Ella es parte del proyecto “Leer para aprender” que nace de la Política de Infancias y Juventudes de la comuna y que se propone incentivar la lectoescritura en niños, niñas y jóvenes. Para eso, la profesora hace énfasis en que no es necesario solo contar cuentos a los niños, sino que también “se les puede leer una receta de la abuela o los mismos carteles de la calle para introducirlos en el mundo de las letras”. 

A través de la pantalla del computador se ve la pared verde de la casa de Patricia Elizalde. Hay dos pequeñas pizarras colgadas, una en blanco y la otra con dibujos en relación a la letra “i”. Patricia es educadora de párvulos y está enseñando las vocales de manera online. Ha convertido una habitación de su hogar en aula.

 “Me he inmiscuido en el proyecto de diferentes maneras” cuenta la profesora: “desde el colegio, a través del equipo directivo, de los talleres que ha realizado Grupo Educativo y desde las trayectorias educativas como parte del comité de educadoras de párvulos de la comuna”, menciona Patricia, haciendo hincapié en que la iniciativa es fundamental en el desarrollo de los niños, niñas y jóvenes. 

Vive en Lanco y trabaja hace aproximadamente 16 años en la escuela Felipe Barthou Corbeaux. Profesora de prekinder y kinder, junto con una colega se turnan los cursos. Además, cumple el rol de coordinadora de ciclo desde prekinder hasta cuarto básico, apoya a sus compañeros y también en el trabajo de gestión de la escuela y el equipo directivo.  Estudió en la Pontificia Universidad Católica de Chile, trabajó en Fundación Integra seis años, y después volvió a lo municipal, ya que le agrada el sector y busca apoyar y educar dentro de la vulnerabilidad. 

“Me parece interesante lo que podríamos hacer en la comunidad y la forma cómo pueden apoyar este trabajo desde sus hogares o desde su propia experticia. Yo creo que podemos realizar un trabajo bastante interesante, si realmente llegamos a la comunidad con acciones directas”, menciona Patricia.  

Enseñar de una manera entretenida es fundamental para la profesora, no obligar al niño a leer sino motivar a los jóvenes. “No es necesario que los niños de kinder aprendan a leer, pero consideramos importante que se fomente la conciencia fonológica, que conozcan sonidos básicos. Incentivamos la lectura al contarle cuentos, el colegio adquirió el compromiso de trabajar el discurso narrativo para que el niño ordene la lectura. Trabajamos con manzanitas, por ejemplo: la manzana entera sería el inicio; la que está a medio comer sería el desarrollo y la manzana sin nada sería el final”

Patricia Elizalde, Docente Escuela Felipe Barthou

Patricia Elizalde, Docente Escuela Felipe Barthou

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